En cuanto la protección natural de la luz desaparecía y las sombras se adueñaban de todo, su influencia sobre mí crecia.
Me llamaba. Su influjo llegaba desde el rincón mas oscuro e ignoto de la librería, prometíendome conocimientos prohibidos y oscuras artes olvidadas.
El domingo me rendí, el tormento llegó a su fin. He cedido y ya lo tengo en mis manos. Ahora a esperar el volumen II.

Escuchando Is it you? de Wumpscut.
Tengo algo de agujetas, que no sufría desde hace mucho mucho tiempo. Espero no seguir perdiendo peso. Solo queda un mes.