Ayer me encontré con un vecino que es ingniero industrial pero que trabaja en Airbus (¡infiltrado!). Me comentó que a quien veía por allí era a otro compañero del colegio que empezó la carrera conmigo y del que perdí la pista prácticamente cuando pasé a segundo.
El chaval este era el típico que siempre te encontrabas a primera hora y te decía la frase de poder: "Nos falta uno para el mus, ¿te apuntas?". Siempre fallaba la tirada de salvación. Esa y la siguiente, cuando tocaba la siguiente clase y: "¿te vas a ir ahora?, ¡no jodas!, si la siguiente no sirve para nada".
Al tiempo me dí cuenta que me tenía que alejar de esas personas si quería aprobar los exámenes. De hecho siempre me sorprendió el hecho de que acabara la carrera (creo que debió de terminar la carrera cuando yo terminé superiores). De la gente de primero creo que debió de sobrevivir un 30%.
Era un juerguista nato y no le gustaba lo que estudiaba. Lo suyo era otra cosa.
Claro que con 28 tacos uno no es el mismo que con 18 pero como no he actualizado la imagen mental que tengo de él me sigue chocando que semajante persona tenga un puesto de responsabilidad.
Y luego me preguntan porque tengo miedo a montarme en los aviones.
Más sorprendente fue el encontrarme hace pocos días con otra compañera del colegio. Resultó que estaba embarazada de unos cuantos meses. Que viejo se hace uno, aún la recuerdo saludándome en bikini desde su terraza cuando un día salía del metro (su bloque era el que está en frente del metro, y a veces tomaba el sol en su terraza del ¿octavo?). Me pasé ese año mirando la terraza cada vez que salía del metro.
Para mí siguía siendo esa chica de 16 años que gritaba mi nombre desde las alturas en su pequeño santuario inalcanzable, y ahora mira.
El link de hoy, para los que no pueden esperar al Q4 y no tienen a mano el Q3: nexuiz, y es gratuito.
viernes, agosto 26, 2005
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